Nos despertamos, aquí es dónde dormimos:
Fuimos a ver el monte del infinito y conseguí lo que quería ser la primera en subir al Big Buda y hacerme la foto sin gente….y lo conseguí!
Generalmente abre de 10-18 horas pero como es el cumple del Buda pues abren a las 9:30 horas y allí estaba yo corriendo escaleras arriba para tener la foto!
El monasterio estaba repleto de gente con incienso y ofrendas y unos barquitos de papel que no supimos para que eran.
Eso sí, el incienso tenía varios tamaños, varillas pequeñas, grandes y tan grandes como yo que mido 1 metro 80…..
Llegamos al pueblo de Tai O, se puede llegar mediante bus, el número 11 desde el Big buda pero hay que recordar que en el cumpleaños de Buda también se duplica el coste del autobús.
Y andamos y andamos y dejamos el pueblo de Tai O en busca de nuestro camping libre de esta noche y llegamos y lo vimos y nos fuimos. ERA UN HORROR, no había dormido allí nadie en meses y estaba cubierto de vegetación y un millón de tipos de bichos diferentes, las referencias que habíamos visto en internet es que era un camping estupendo con vistas al mar y lo que resultó ser un camping totalmente abandonado sin vistas al mar y lo poco que se veía era un mar cubierto de basura, así que con las mismas regresamos al pueblo con las mochilas, los aislantes y la tienda de campaña para disfrutar de Tai O.
Es un pueblecito de pescadores con casas flotantes por palos que están en el interior del mar.
Lo típico tipiquisimo es coger una barca y dar una vuelta por las inmediaciones, totalmente recomendable, para ver los delfines rosas, que al parecer nunca se ven porque están haciendo un puente que conecta Tai o con HK y los que no han muerto se han ido.
Hay varios templos, miles de turistas, cientos de comerciantes vendiendo pescado seco y unos dumplins rellenos de almendra picada cubierto de pasta de arroz.
Y comiendo en un restaurante en el que solo había carta en chino, según nuestros fines, decidimos ir a dormir al Big buda, a nuestro camping ideal.
Llegamos en el bus 11 y tras recorrer todo el complejo hasta llegar a la zona de acampada vimos que estaba totalmente full, familias enteras con tiendas de campaña enormes, cochones hinchables, banderillas, luces de colores, mas menaje de cocina del que puedo tener yo en mi casa y hasta un proyector!! Pero a educados no les gana nadie y nos dejaron una parcela para la tienda y luego nosotros compartimos nuestra parcela con otra parejita.
Y volvimos a disfrutar una vez montada la tienda de la paz que desprendía el big buda sin nadie. Y dormimos, esta vez sí con el chino de fondo…..